No hay dos sin tres
Jorge Sanz | 2009-01-12 | 350 words | meta
Llevo sin actualizar el blog demasiado, los follones del día a día, mudanza incluida me han hecho descuidar este pequeño espacio (bueno, este y el otro[1]). Así que nada, vuelvo a postear con una nueva intención:
Si ya me cuesta actualizar dos blogs, voy a ver si **con un tercero** ya la termino de liar :D.
La cuestión es que en un blog como este los artículos requieren cierto contexto: tiempo, ganas y _tranquilidad _sobre todo lo que me lleva a muchas veces dejarlo por pura pereza/lío/whatever.
Los libros[2] que vaya leyendo espero seguir posteándolos por aquí y si algún día me da un venazo o ataque blogueril[3] sobre el tema que me pique la oreja seguirá siendo este el sitio en el que lo cuente.
La novedad es que visto que el microblogging[4] me va (postear en twitter me cuesta segundos gracias a Pidgin[5]) y que cada día me gusta menos Facebook [6](ya casi ni entro porque la verdad es que en mi grupo de amigos casi no hay interacción de la que a mi me gustaría). Así pues he buscado una fórmula intermedia entre el microblogging y el blogging tradicional. Se trata de tumblr[7], un sitio para postear artículos cortos, simples citas o vídeos.
Subir algo al tumblr es muy ágil (incluso se puede hacer con un mail aunque no lo he probado todavía) y si algún día tengo ganas hasta me puedo currar el aspecto del sitio, aunque la brutal simpleza del actual[8] me encanta.
Como Facebook es así de fino, sólo me deja importar **un único RSS** con lo que me veo en la tesitura de tener que elegir entre mis Notas[9] y El bloc de Oblongo[10]. Me quedo con el primero porque va a ser más activo y si a alguien le interesan las majaderías que uno aquí pueda contar (por las visitas unas nueve personas actualmente) pues pueden seguir haciéndolo por el RSS[11].
Así que nada, nos seguimos viendo en la red de verdad porque *El bloc de Oblongo* dice bye bye al *Fakebook* y deja paso a algo más mundano y superficial[12] :D
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