El último lector - David Toscana
Bastante ecléctica la idea de mezclar personajes y escenarios de El llano en llamas, un tenue y distante bosquejo del patológico amor de Lolita, y algo de desamor de El amor en los tiempos del cólera, toda esa mezcla el regiomontano la emplata en la literatura como eje central de una meta novela que se pasea por la fantasía y retorna a la sórdida realidad de un pueblo en ecodecadencia llamado Icamole, lugar histórico donde el ejército de Porfirio Díaz experimentó una monumental pérdida, por la que se le dio el mote de El llorón de Icamole.
Para los lectores conservadores tal combinación puede ser aventurada in extremis, pero relatar la desaparición y posterior aparición de una niña muerta-antes-viva en un pueblo agonizante, pretexta a David Toscana la narración cotidiana de los pobladores, pero desde la crítica y casi mesiánica mirada del bibliotecario de tan analfabeta localidad. Lucio evoca a través de las anécdotas que sus eternas lecturas le han otorgado, la realidad paralela de los sucesos en Icamole, con fragmentos de novelas, cuentos y poemas refinadamente seleccionados que le dotan al pueblo bárbaro, su gente, y el asesinato inexplicable de una niña, de tintes grandilocuentes cargados de significado.
Esta novela es una alegoría al dialogo que existe entre la realidad y la ficción.
Finalmente es menester decir que la escuche en audiolibro y la narración de Javier Poza ensalza la obra.